Estoy preparando un pots bien chido sobre como vestir y calzar siendo pobre en las europas. Pero ese va para el blog de No le cuentes a mi madre así que deberán trasladarse haaaasta allá para leerlo pero les será útil ya lo verán.
Mientras les cuento que hoy se inauguró el Oktoberfest acá en Munich y pues ya empieza a apoderarse del aire esa brisita olorosa a eructo de borracho que no se quita sino hasta mediados de Octubre. Bien nice. Lo chido esque andan todas las viejas por la ciudad borrachinas y con sus dirndls (vestidito típico bávaro) enseñando chiche indiscriminadamente tons es un buen taco de ojo debo confesar. El día primero le llaman "O'zapft is" que es una palabrilla en bávaro que se refiere a la partida de madre que le dan al primer barril con que inauguran el festival. Generalmente la partida de madre es llevada a cabo por el alcalde en turno. Todos hacen sus apuestas de cuantos chingadazos necesitará darle hasta que si se rompa. Al parecer éste alcalde está pagüerful y todos le echan entre 2 y 3 fregazos pero se han dado casos de alcaldes que quedan en ridículo a la dale y dale como si fuera piñata y nomás no lo rompen.
Dato curioso del Oktoberfest:
En promedio se consumen 6'940,600 litros de chela en los 16 días que dura. O_O
Prometo ir y ponerme bien peda pa contarles qué tal, al parecer no te la pasas chido si no te pones bien baboso.
Y entre otras cosas importantísimas de la vida, platícoles que Miko (mi perro galán, juguetón y sensual) además de todo es bien fans de Cortázar. Siempre procuro educar a mis perros de una manera culturosa y literaturosa pa que ningún perrucho me los ande apantallando con sus volteretas, rodadas, dames-la-manita y demás truquitos insulsos. U_U
Miko inmerso en un cuento de Julio Cortázar.
Un perro inteligente y culto, por supuesto, lo que creo que no se le va a quitar ni leyendo es la cara de pendejo tan hermosa que tiene.
¿uh?
n_n
Besos babeados.